El ejercicio fortalece el corazón, y ayuda a bombear más sangre con cada latido; esto aporta más oxígeno al cuerpo, y con más oxígeno, el cuerpo funciona más eficazmente. El ejercicio puede acelerar la pérdida de peso si se combina con una dieta saludable. El ejercicio regular desarrolla el músculo magro, que quema más calorías que la grasa. Un metabolismo activo te ayuda a quemar calorías más rápidamente, incluso cuando estás sentado.
El ejercicio aeróbico favorece una respiración más profunda, lo que obliga al corazón a trabajar más para bombear la sangre. El ejercicio aeróbico también eleva el ritmo cardíaco, lo que quema calorías. El ejercicio aeróbico incluye caminar, trotar, correr, bailar, nadar y montar en bicicleta.
Tu médico puede sugerirte un régimen de ejercicio diferente en función de tu salud. Por ejemplo, alterna los días de ejercicio con los días de descanso o los días en los que hagas otro tipo de ejercicio; esto te ayudará a prevenir lesiones.
La pérdida o el control del peso, más el ejercicio, es la mejor combinación para un corazón y un estilo de vida saludables. Cuida tu salud.
La práctica de ejercicio es tu mejor aliada para bajar de peso. Al ejercitarte, tu cuerpo quema calorías, aumenta el metabolismo y fortalece los músculos. Además, libera endorfinas que te harán sentirte mejor. Lo más importante es que sea constante en el tiempo e incorporar esta práctica de ejercicio en nuestra rutina del día a día para conseguir resultados satisfactorios.